Los 7 Hábitos de las Personas Altamente Ineficientes.
Sthephen
Convey nos enseñó los hábitos de las personas altamente eficientes. Los
aprendimos, los aplicamos, y nos beneficiamos enormemente de ellos.
David Allen nos enseñó cómo terminar lo que empezamos. Nos aprendimos las técnicas y nuestra productividad se incrementó dramáticamente. Pero no todo el mundo ha hecho progresos. La mayoría de la gente- de hecho alrededor del 90%- aún lucha por terminar lo que empezó. La razón: Sus propios hábitos evitan que hagan lo que se requiere para alcanzar sus metas.
Estos son los 7 hábitos de las personas altamente ineficientes:
1. Dudan tener lo que se requiere.
Las personas altamente ineficientes están atormentadas por la auto-duda. Carecen de confianza. Nunca están seguras de tener lo que se requiere para ser exitosas. Confunden la falta de experiencia con la falta de habilidad. Ven a los desafíos como amenazas, y oyen a las sugerencias o comentarios como críticas. Prefieren lo familiar a lo desconocido, y la seguridad de no intentarlo en lugar del riesgo a fracasar- hasta que un día dejan de buscar oportunidades del todo.
2. Esperan demasiado para empezar.
Las personas altamente ineficientes aplazan bastante. Y entre más esperan para completar las cosas, más altas son las posibilidades de nunca terminar. Perciben el tiempo como ilimitado e indulgente, sin darse cuenta que el tiempo- a diferencia del dinero- es el único recurso que no se puede recuperar una vez perdido. Aquellos que pueden cumplir con los plazos de tiempo, incluso dejándolo todo para el último minuto, desarrollan una falsa sensación de confiar en que ellos pueden “cumplir con las cosas.” No entienden, de cualquier modo, que hacer las cosas es muy diferente a hacer las cosas bien.
3. Pierden la paciencia muy rápido.
A personas altamente ineficientes no les agrada esperar demasiado. Son fanáticos de los resultados rápidos: Vuélvete millonario rápido. Adelgaza rápido. Vuélvete más inteligente rápido. Y se decepcionan rápido cuando no obtienen resultados pronto. Buscan constantemente atajos: ¿Cuál linea de la autopista es la más rápida? ¿Que linea en el súper es más corta? ¿Cuál cajero es más rápido? Están constantemente peleando contra el reloj, tratando de hacer las cosas rápido en lugar de hacerlas bien. Pero al cambiar la calidad por la velocidad, eventualmente pasan más tiempo arreglando errores que haciendo progresos.
4. Son multitareas desvergonzados
Las personas altamente ineficientes son incapaces de enfocarse en una cosa a la vez. Ponen demasiado en el plato e intentan comerlo todo a la vez. Te hablan mientras textean a alguien más. Escuchan alguna llamada en conferencia mientras hacen la lista de la semana. Su idea de hacer planes es saturarse completamente. Al final del día, se sienten física y mentalmente exhaustos, pero sin mucho que ofrecer al final.
5. Quieren un cambio sin tener que cambiar
Las personas altamente ineficientes le dan la bienvenida al cambio pero no lo hacer suyo. Desesperadamente quieren un cambio en su vida, pero se resisten a hacer lo que se tenga que hacer para conseguirlo. Objetan nuevas ideas y se oponen a nuevas prácticas. Evitan aprender nuevas técnicas o aplicar nuevas tecnologías. Y son siegas a diferentes puntos de vista. Son persistentes, pero se vuelven obstinadas. Eventualmente, cruzan la linea entre ser perseverante y estar perseverando. Encarnan el dicho, “No puedes enseñarle nuevos trucos a un perro viejo.”
6. Se esmeran en la perfección.
Las personas altamente ineficientes trabajan duro, pero desperdician sus esfuerzos en los detalles- en ocasiones, detalles que a nadie más le importan- y se pierden del punto principal. Están más interesadas en salir con una idea “perfecta” en lugar de una idea útil. Están más inmersos en crear un producto sin perfecto que en aprender que hacer para mejorarlo. Se preocupan más por evitar los errores que aprender de ellos y así crecer. Como resultado, su búsqueda para cumplir sus metas se vuelve una salvaje persecución de gansos.
7. Se quejan bastante.
Las personas altamente ineficientes tienen una visión pesimista de la vida. Gastan más tiempo y energía quejándose de lo que está mal, culpando a otros, y sintiéndose mal consigo mismas, que enfocándose en los medios o las formas de mejorar las cosas. Hacen montañas de pequeños baches, e incluso gustan de creer que no son responsables de ninguna manera por el estado de sus vidas.
Escrito por el Dr. Theo Tsaousides para Psychology Today
Traducción @MudoZeitgeist para Un Tipo de Traje y Corbata.
David Allen nos enseñó cómo terminar lo que empezamos. Nos aprendimos las técnicas y nuestra productividad se incrementó dramáticamente. Pero no todo el mundo ha hecho progresos. La mayoría de la gente- de hecho alrededor del 90%- aún lucha por terminar lo que empezó. La razón: Sus propios hábitos evitan que hagan lo que se requiere para alcanzar sus metas.
Estos son los 7 hábitos de las personas altamente ineficientes:
1. Dudan tener lo que se requiere.
Las personas altamente ineficientes están atormentadas por la auto-duda. Carecen de confianza. Nunca están seguras de tener lo que se requiere para ser exitosas. Confunden la falta de experiencia con la falta de habilidad. Ven a los desafíos como amenazas, y oyen a las sugerencias o comentarios como críticas. Prefieren lo familiar a lo desconocido, y la seguridad de no intentarlo en lugar del riesgo a fracasar- hasta que un día dejan de buscar oportunidades del todo.
2. Esperan demasiado para empezar.
Las personas altamente ineficientes aplazan bastante. Y entre más esperan para completar las cosas, más altas son las posibilidades de nunca terminar. Perciben el tiempo como ilimitado e indulgente, sin darse cuenta que el tiempo- a diferencia del dinero- es el único recurso que no se puede recuperar una vez perdido. Aquellos que pueden cumplir con los plazos de tiempo, incluso dejándolo todo para el último minuto, desarrollan una falsa sensación de confiar en que ellos pueden “cumplir con las cosas.” No entienden, de cualquier modo, que hacer las cosas es muy diferente a hacer las cosas bien.
3. Pierden la paciencia muy rápido.
A personas altamente ineficientes no les agrada esperar demasiado. Son fanáticos de los resultados rápidos: Vuélvete millonario rápido. Adelgaza rápido. Vuélvete más inteligente rápido. Y se decepcionan rápido cuando no obtienen resultados pronto. Buscan constantemente atajos: ¿Cuál linea de la autopista es la más rápida? ¿Que linea en el súper es más corta? ¿Cuál cajero es más rápido? Están constantemente peleando contra el reloj, tratando de hacer las cosas rápido en lugar de hacerlas bien. Pero al cambiar la calidad por la velocidad, eventualmente pasan más tiempo arreglando errores que haciendo progresos.
4. Son multitareas desvergonzados
Las personas altamente ineficientes son incapaces de enfocarse en una cosa a la vez. Ponen demasiado en el plato e intentan comerlo todo a la vez. Te hablan mientras textean a alguien más. Escuchan alguna llamada en conferencia mientras hacen la lista de la semana. Su idea de hacer planes es saturarse completamente. Al final del día, se sienten física y mentalmente exhaustos, pero sin mucho que ofrecer al final.
5. Quieren un cambio sin tener que cambiar
Las personas altamente ineficientes le dan la bienvenida al cambio pero no lo hacer suyo. Desesperadamente quieren un cambio en su vida, pero se resisten a hacer lo que se tenga que hacer para conseguirlo. Objetan nuevas ideas y se oponen a nuevas prácticas. Evitan aprender nuevas técnicas o aplicar nuevas tecnologías. Y son siegas a diferentes puntos de vista. Son persistentes, pero se vuelven obstinadas. Eventualmente, cruzan la linea entre ser perseverante y estar perseverando. Encarnan el dicho, “No puedes enseñarle nuevos trucos a un perro viejo.”
6. Se esmeran en la perfección.
Las personas altamente ineficientes trabajan duro, pero desperdician sus esfuerzos en los detalles- en ocasiones, detalles que a nadie más le importan- y se pierden del punto principal. Están más interesadas en salir con una idea “perfecta” en lugar de una idea útil. Están más inmersos en crear un producto sin perfecto que en aprender que hacer para mejorarlo. Se preocupan más por evitar los errores que aprender de ellos y así crecer. Como resultado, su búsqueda para cumplir sus metas se vuelve una salvaje persecución de gansos.
7. Se quejan bastante.
Las personas altamente ineficientes tienen una visión pesimista de la vida. Gastan más tiempo y energía quejándose de lo que está mal, culpando a otros, y sintiéndose mal consigo mismas, que enfocándose en los medios o las formas de mejorar las cosas. Hacen montañas de pequeños baches, e incluso gustan de creer que no son responsables de ninguna manera por el estado de sus vidas.
Escrito por el Dr. Theo Tsaousides para Psychology Today
Traducción @MudoZeitgeist para Un Tipo de Traje y Corbata.
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