El Poder del Honor

Haciendo un repaso de la vida y el trabajo de Michael Ruppert y de tantas otras personas que se esfuerzan y dan todo en sus vidas y en sus profesiones, me doy cuenta que es el honor y el amor lo que los mueve a darlo todo con tal de ayudar, informar, hacer razonar y liberar la mente de el resto de nosotros, veo el honor como una forma de entender sus vidas y como un servicio a los demás, por supuesto que casi siempre el amor acompaña a esta forma de sentir y de ser, a esta incorruptividad, a este valor de entregar sus servicios a quienes quieran perjudicar a los demás, y son estos dos motores los que alimentan sus vidas, sus profesiones y sus esfuerzos y los que inspiran a resto de nosotros a hacer palpitar el corazón en la misma frecuencia.

Decía Michael Ruppert que "Un guerrero necesita una pelea honorable," y que muchos en su país fueron engañados pensando que al enlistarse en el ejército pelearían esa guerra honorable en contra del terror, muchos de los que después regresaron a su país, ya descontentos y con los ojos abiertos a la realidad vieron en los movimientos sociales una nueva forma de defender aquello por lo que habían decidido luchar, la verdadera lucha honorable.

No se tiene que ser soldado para ser un guerrero o guerrera, es el espíritu guerrero lo que hace falta, el no aceptar lo que te imponen cuando esto perjudica a los demás seres humanos, el levantar la cabeza y acelerar el corazón a la hora de enfrentar la tiranía, la estupidez, la opresión, la avaricia, el dolor. El honor para mi, es aceptar también cuando nos equivocamos, cuestionar lo que parece normal y común, dar lo mejor pero también buscar lo mejor, para uno mismo y para los demás, y el honor está ahí en el corazón de mucha gente y más y más personas se inspiran para alimentar este sentimiento, esta fuerza, este motor de la vida humana.

Levantar la cabeza y enfrentar a los monstruos, las máquinas, los grupos que pretenden alimentarse de la vida de los demás como parásitos insaciables que quieren más y más, decir no es demostrar fortaleza, no acatar ordenes injustas y defender a los demás, es hacer de nuestra vida una vida honorable, es alimentar el espíritu guerrero, es al final de cuentas entender nuestra humanidad y nuestro potencial y dejar de ser víctimas, dejar de ser explotados y usados como combustible para esta maquinaria de corrupción que está acabando con la vida humana y con los ecosistemas de nuestra tierra, con nuestra naturaleza sociable y nuestro amor de hermanos y hermanas.

El honor está en mi corazón ¿está también en el tuyo?

@MudoZeitgeist para Un Tipo de Traje y Corbata.